Florencia Bascom nació en Massachusetts en 1862. Geóloga estadounidense.
Hija de John Bascom, profesor y luego Presidente de la Universidad de Wisconsin-Madison, Florencia recibió una esmerada educación. Su largo camino de lucha, lleno de obstáculos para estudiar, de tratar de pasar inadvertida en el salón de clases por el rechazo de los estudiantes varones, no le impidieron obtener dos títulos universitarios: en 1882 en Artes y Letras y de Ciencias en 1884. Luego recibió su doctorado en geología, en 1893, por la Universidad Johns Hopkins.
Florencia fue docente en la Universidad de Mujeres Bryn Mawr a partir de 1895, donde enseñaba geología, aportando ella los minerales y rocas que recolectaba. Muy decidida y apasionada por su trabajo, pero exigente con las alumnas, fundó un departamento de geología, que se convirtió en el lugar de formación de geólogas más relevante de principios del siglo XX.
En 1896, fue la primera mujer contratada por el Servicio Geológico de Estados Unidos, y donde continuó por cuarenta años, hasta 1936. Sus investigaciones científicas en las rocas cristalinas de las montañas Apalaches, sobre los cristales minerales, las rocas metamórficas y el estudio de cómo se forman las montañas, la hizo una experta en cristalografía, mineralogía y petrología. La petrología es la rama de la geología que se ocupa del estudio de las rocas, de sus propiedades físicas, químicas, cronológicas y de sus relaciones con otras rocas y cómo se erosionan hasta convertirse en arena.
Escribió más de 40 publicaciones y sobre la geomorfología del Piamonte: región situada en el este de Estados Unidos entre la llanura costera del Atlántico y las montañas de los Apalaches. Actualmente sus investigaciones siguen siendo valorados por los geólogos que trabajan en esa zona. Fue la primera mujer que presentó un artículo ante la Sociedad Geológica de Washington en 1901. En 1928 Florencia se retiró de la docencia de Bryn Mawr, pero continuó en el Servicio Geológico, hasta 1936.
Después de retirarse de Bryn Mawr, Florencia Bascom retornó a su ciudad natal en Massachusetts, donde falleció en 1945. El asteroide 6084 descubierto en 1985 fue bautizado Bascom en su honor y un cráter en Venus, también fue nombrado Bascom en 1994.
Fuentes y Bibliografía
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