miércoles, 26 de enero de 2022

Siglo XX - María Rostworowski

            Breve Biografía de María Rostworowski 


María Rostworowski nació en Lima  en 1915. Investigadora  social
historiadora e intelectual peruana. 

Hija de un ingeniero y aristócrata polaco y una madre puneña (de Puno, en el sur del Perú), de acomodada familia, María pasó su infancia y adolescencia en varios países de Europa. Se educó con institutrices y luego en un prestigioso colegio inglés. Estando en Polonia, María se casó a los 19 años con un noble polaco, con quien tuvo una hija, Cristina. Al regresar a Perú la pareja se divorció.

Tiempo después se casó con el empresario Alejandro Diez Conseco; la pareja realizó varios viajes al interior del Perú, lo que le permitió a María apasionarse sobre la cultura e historia de los incas. Su esposo tuvo gran influencia y la alentó en su vocación de historiadora. Su interés en estudiar el pasado andino fue recibido con indiferencia y menosprecio, tanto en el ambiente académico como en la sociedad de la época, por ser mujer y autodidacta. En Perú había y hay, mucho racismo estructural que crea brechas tanto en la educación como en las oportunidades que les dan preferencia a los de una raza en lugar de los de otra.  Muchos de la comunidad intelectual le aconsejaban que “dejara de estudiar indios y que mejor estudiara “la conquista por los españoles”.

Conoció al historiador Raúl Porras Barrenechea (1897-1960) quien se convirtió en su tutor, completando su gran formación en historia, lingüística y botánica. A pesar de las adversidades, con gran curiosidad e interés hurgó en los archivos, crónicas  y documentos burocráticos inéditos, donde encontró numeroso material e información: la Cultura Inca es una de las más complejas  de la América precolombina,  que dio origen al último Estado autóctono o indígena: el gran Imperio Tahuantinsuyo.  María publicó su primer libro en 1953, una biografía de “Pachacútec, inca Yupanqui” (1400-1471) donde resaltó la importancia de este gobernante inca que convirtió,  de un simple curacazgo o reino del Cuzco  en la construcción y fundación del Tahuantinsuyo en 1438.

Tras la muerte súbita de su esposo en 1961, fue alumna libre de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde grandes maestros, además del profesor  Porras Barrenechea, la introdujeron en las fuentes históricas de la época: estudió la etnohistoria. En una entrevista dijo: ”No hay razas puras, todos somos mezclados, pero cholos solo somos nosotros, los peruanos”.

En 1964 fue una de las fundadoras del Instituto de Estudios Peruanos, un centro de investigación social y de la realidad del Perú. Su contribución a este Instituto fue muy valorada ya que se ha dedicado con talento y tenacidad a la investigación histórica que  ha plasmado en muchas de sus obras.  

En su prolífica y exitosa carrera académica, María publicó sobre sus amplios y detallados estudios de las sociedades prehispánicas del Perú y el Imperio Inca: “Los ascendientes de Pumacahua”, “Etnia y sociedad: costa peruana prehispánica” (1977), ”Señoríos indígenas de Lima y Canta” (1978), “Recursos naturales y pesca” (1981). Otras obras están orientadas sobre los estudios de género: “La mujer en la época prehispánica” (1986) y "Mujer y Poder en los Andes Coloniales: “Doña Francisca Pizarro, una ilustre mestiza” (1989)  o los cultos precolombinos: "Estructuras andinas del poder. Ideología religiosa y política” (1983), “Pachamacac, “Historia del Tahuantinsuyo” (1988), su libro más difundido tanto en el Perú como en el extranjero, también es una fuente de consulta en colegios y universidades de Perú.

Ha publicado numerosos artículos en importantes revistas especializadas de  Arqueología y Antropología. En su aporte académico dio constante apoyo a grupos de investigadores, arqueólogos y profesionales, transmitiéndoles su tenacidad y entusiasmo, al buscar en la historia una identidad personal y social  peruana. Como abuela incursionó en la publicación de cuentos para niños sobre la base de mitos y leyendas andinas.

Se ha desempeñado en varios cargos con igual pasión y dedicación: como investigadora trabajó en el Museo de la Cultura Peruana, fue directora del Museo Nacional de Historia, Presidenta de la Asociación Peruana de Etnohistoria, miembro de la Real Academia de Historia (España) y de la Academia Nacional de Historia (Argentina).  Ha recibido numerosos premios, reconocimientos, y Doctor Honoris causa de varias universidades del Perú y el mundo.

María Rostworowski, destacada historiadora e intelectual peruana, falleció en 2016,  a los cien años de edad.

lunes, 10 de enero de 2022

Siglo XIX - Harriet E. Wilson

          Breve Biografía de Harriet Wilson 

Harriet  E. Adams nació  en Milford, New Hampshire, entre 
1825 y 1828, no hay fecha exacta. Primera escritora negra que publicó una novela en Estados Unidos.

Era hija mestiza de una lavandera de ascendencia irlandesa y un afroamericano, aunque nació como una negra libre, quedó huérfana muy  joven y trabajó,  según el censo de 1840, como ”sirvienta contratada” para una familia de la ciudad. A cambio de su trabajo, era habitual en la sociedad de la época, que la huérfana recibiera alojamiento, comida y capacitación en habilidades que le permitieran trabajar para mantenerse independiente.

Al finalizar el contrato, a los dieciocho años, Harriet trabajó como empleada doméstica y costurera en hogares del sur de New Hampshire. Se casó  en 1851 con Thomas Wilson, que decía ser un esclavo fugitivo y abolicionista.  Un año más tarde y poco antes de nacer su hijo, Thomas abandonó a su esposa, trabajó como marinero y tiempo después murió. El pequeño hijo, George, murió en 1860, a los siete años.

Hattie,  como era conocida,  se trasladó a Boston a trabajar como modista, mientras escribía  una novela; en 1859 registró los derechos de autor y pagó con su propio dinero la publicación en la imprenta. “Nuestra Negra, esbozos de la vida de una negra libre” (= Our Nig: Sketches from the Life of a Free Black) aunque se publicó de forma anónima, fue la primera novela que publicaba un afroamericano en Estados Unidos.

El libro no se vendió bien, fue menospreciado ya que se creía que era obra de un escritor blanco; su protagonista era una mujer que denunciaba las dificultades de la vida de los negros libres, la hipocresía de la burguesía del norte y las formas de explotación laboral, casi esclavista, en una sociedad donde se formó el movimiento abolicionista.   

Más tarde Harriet se asoció con la iglesia espiritista que estaba involucrada en el movimiento de reforma, luchaba contra la esclavitud y promovía los derechos de las mujeres. Harriet  se hizo conocida en los círculos espiritistas como la “médium de color”: era una sanadora espiritual (=médico clarividente). Participó activamente en la comunidad local como oradora  y conferencista en trance. Realizó un circuito de conferencias públicas donde hablaba sobre sus experiencias de vida.

En 1870 viajó a Chicago para asistir como delegada de la Asociación Americana de Espiritistas donde dio conferencias sobre reforma laboral  y educación infantil. Durante casi veinte años, desde 1879 hasta 1897 fue ama de llaves de una pensión en una vivienda de dos pisos.

Harriet Wilson falleció en 1900 en Quincy, Massachusetts. 

La novela pasó mucho tiempo en la oscuridad, hasta que, más de un siglo después, en 1982 el crítico literario e historiador Henry L. Gates (1950- ) descubrió las primeras obras literarias de escritores afroamericanos y publicó varios artículos sobre cómo apreciar la literatura y la cultura negra en el mundo occidental.  En su investigación  reencontró el libro de Harriet Wilson,  Our Nig y la  documentó como la primera novela afroamericana publicada en los Estados Unidos. Se ha descubierto semejanzas entre la narrativa de Harriet y su propia vida, lo que ha llevado a estudiosos a considerarla autobiográfico.  No hay evidencia de que haya escrito nada más.