Alicia Goyena, nació en Montevideo, en 1897, docente uruguaya de fecunda trayectoria. Estudió en la Universidad de Mujeres, creada en 1912, por una ley propuesta por el presidente Batlle y Ordoñez (1856-1929), como una necesidad de incorporar a las mujeres a la vida cultural y social activa.
En esa institución comenzó a ejercer la docencia en 1918 como profesora de Historia Americana, más tarde en 1922 ocupó la Cátedra de Literatura, sucediendo en el cargo a la poetisa Ma. Eugenia Vaz Ferreira, quien había sido su profesora. Paralelamente, y ya en la década del 30, bajo el gobierno de Gabriel Terra (1873-1942), se desempeñó como Secretaria de Redacción de la revista "Ensayos", publicación impulsada por un grupo de profesores con el objeto de promover y preservar los valores culturales y cívicos de la nación. Tenaz opositora a la dictadura, participó en actividades de resistencia.
Salvo algunos artículos de pedagogía, no dejó casi obra escrita; su obra se veía en la práctica, en la vida misma, en diálogos con el alumnado. En 1944, la Universidad de Mujeres se transformó en el Instituto Batlle y Ordóñez, I.B.O.; ese mismo año Alicia fue designada Directora del I.B.O. donde impuso una dirección ejemplar. Aspiraba a la creación de una cultura superior, porque creía que el alumnado, después de egresado, debía seguir educándose a sí mismo, sin dogmatismos ni preconceptos.
Su idealismo se proyectaba hacia el plano de la axiología (=teoría crítica de los valores), y de la defensa del laicismo. Tomaba como ejemplo a José Enrique Rodó (1871-1917) y Carlos Vaz Ferreira (1872-1958); tenía la pedagogía del respeto, insistía en la orientación hacia los valores esenciales, que debían nacer, no por imposición sino de adentro hacia afuera del alumno.
Su gran secreto era que sembraba amor: detrás de su suave y agradable voz había firmeza y voluntad, pues era valiente para enfrentar situaciones difíciles, a veces, dramáticas. Su modestia y humildad, su generosidad, su don de escuchar, son un ejemplo que perdurará en la memoria de los uruguayos.
Alicia Goyena murió en 1977, luego de 33 años al frente del Instituto, apenas unos meses después de haber sido destituida por la dictadura cívico-militar.
En 1982 por un Poyecto de Ley, se designó al Liceo No. 29 con su nombre, y en 1986, se creó la Cátedra Alicia Goyena para honrar su memoria, con el objetivo de elevar el nivel de educación de los docentes en todas las formas de expresión artísticas, culturales y pedagógicas dentro del marco de gratuidad y laicidad de la educación pública.
Fuentes y Bibliografia
http://www.ces.edu.uy/ces/index.php?option=com_content&view=article&id=1825
Libro: Nombres Femeninos en el Nomenclátor de Montevideo, de Ma. Emilia Perez Santarcieri
Muchas gracias por compartir esta información.
ResponderEliminarHoy tuve el gusto de asistir a una conferencia en la cátedra Alicia Goyena, y me sentí muy bien recibida allí.
Espero se sigan haciendo buenas obras que conmemoren a esa mujer.
Saludos
Gracias, por la información, la verdad que no tenia idea de la trayectoria de la Prof. Alicia GOYENA, sin dudas voy a visitar la Catedra para interiorizarme mas del tema.
ResponderEliminarTuve el honor de conocerla y estudiar bajo su dirección durante el período 1972-1975. Mujer inteligente, amable, siempre dispuesta a escuchar pero firme a la hora de tomar decisiones.
ResponderEliminarFui alumna del Ibo en 1967 y 68. Ella me firmó el certificado de estudios para la Fac. de Odontología. Ella estaba sentada y apenas se veía detrás de un escritorio lleno de libros,su voz era muy suave. Solo me preguntó qué iba a estudiar. Una maravilla de persona. No me extraña que haya muerto luego de su destitución.
ResponderEliminarMujer ejemplar, mi madre fue alumna suya en el IBO. la apreciaba mucho, y cuando fallecio en 1977, fue a su entierro, en el momento de enterrarla, dieron un discurso, y al final del discurso cuando dijeron "murio", se oyo como un susurro pero muy firme por parte de sus ex,alumnos presente , un "LA MATARON...LA MATARON", desperto en todos un respeto hacia lo sdemas y hacia los valores que perduraran en todos ellos.
ResponderEliminarUna persona muy sabia. Fui alumna suya desde 1972 a 1975. Estaba muy viejita y delgadita, pero tenìa una ternura infinita. Estuve muchas horas charlando con ella. Tenìa hasta los sillones, llenos de libros, hacìa un lugarcito para que te sentaras y te hacìa sentir sumamente importante. Una pedagoga con mayùsculas. Ella amaba todo eso, pero ya no podìa màs. Ahora razono que aparentaba màs de los que tenìa, con su cabellera blanca y sus 50 kg y entiendo cuando decìa que necesitaba que la sustituyeran, pero no sabìa quien era la persona adecuada.
ResponderEliminarTienes toda la razón. Maravillosa persona, no te daba una mano, TE DABA LAS DOS.
ResponderEliminarCuando la traté no me parecía tan mayor. Pero el escritorio lleno de libros era impresionante. La recuerdo con mucho cariño.
FUI ALUMNA DEL LICEO IBO EN EL AÑO 1974 EN ESE ENTONCES ERA FEMENINO,PUDE CONOCER A LA PROFESORA ALICIA GOYENA UN ENCANTO DE PERSONA.TE HABLABA CON MUCHA DULZURA,
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