Santa Dorotea, famosa mártir cristiana nacida a fines del siglo III, en Cesarea, de Capadocia.
En la ciudad gobernaba el Prefecto Saprizio, quien organizó persecuciones contra los cristianos; Dorotea era una joven caritativa, humilde y prudente, que se negó a ofrecer un sacrificio a los dioses, pues ella era cristiana. Logró la conversión al cristianismo de dos mujeres, que fueron enviadas a apartarla de la fe.
Dorotea fue condenada a ser decapitada el 6 de febrero del 304. En el camino al patìbulo, Teófilo, abogado de Saprizio, le declaró que creería en el Dios de los cristianos si le mostraba manzanas y rosas del jardín a donde iba. Dorotea oró a Dios y apareció una canasta con las manzanas y rosas que envio a Teófilo, quien ante el milagro, se hizo cristiano y dio su vida por la fe.
Se le atribuyen milagros importantes, y en su iconografía están siempre presente las manzanas y las rosas.
Se le atribuyen milagros importantes, y en su iconografía están siempre presente las manzanas y las rosas.
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