Elise Deroche (o Baronesa de Laroche) nació en París, en 1886. Primera aviadora francesa y primera mujer con licencia de piloto.
Hija de un fontanero, de joven trabajó como actriz de teatro, usando el nombre artístico de “Raymonde de Laroche”. Le gustaba frecuentar los aeródromos, que en ese entonces eran centros de reunión de la aristocracia, mientras admiraban las proezas de los pioneros de la aviación. Aunque tenía experiencia como piloto de aerostatos, Elise tomó clases de aviación bajo la supervisión de Charles Voisin (1882-1912).
En octubre de 1909 con gran coraje y destreza, Elise realizó su primer vuelo en solitario, al volante de una aeronove más pesada que el aire, recorriendo casi trescientos metros antes de posarse sobre tierra. Aunque fue un viaje corto, mostró gran aptitud y tranquilidad, ya que en esa época elevarse unos pocos metros del suelo era por sí sola una hazaña, y más siendo hecha por una mujer. El avión había sido fabricado por los hermanos Voisin (Gabriel 1880-1973 y Charles), y con el correr de los años la Compañía Voisin construyó más de 75 aviones.
La proeza de Elise fue ovacionada y la noticia salió en la revista Flight que, por error añadió el titulo de baronesa antes de su nombre, conociéndose desde ese momento como Baronesa de Laroche.
Unos meses más tarde, en marzo de 1910, el Aero Club de Francia emitió su licencia en la Federación Aeronáutica Internacional, por lo que Elise se convirtió en la primera mujer del mundo en recibir su licencia de piloto aviador. Soportó discriminación y varios ataques de los aviadores hombres, que no podían aceptar que una mujer realizara ese deporte de alto riesgo, que creían reservado sólo para ellos; incluso su aparato fue victima de algún sabotaje.
Elise participó en exhibiciones aéreas en El Cairo (Egipto), San Petersburgo (Rusia), Budapest (Hungría) y Rouen (Francia). En San Petersburgo el Zar Nicolás II la condecoró con la Orden de Santa Ana por su habilidad como piloto y según algunos autores, fue el propio zar quien le dio el título de Baronesa.
Elise participó de la Gran Semana de la Aviación en Reims, realizando exhibiciones aéreas, cuando en julio de 1910 su aeroplano se estrelló, lo que le produjo graves lesiones; intrépida y perseverante dos años más tarde ya estaba recuperada, pudiendo volver a volar. En setiembre de 1912 tuvo otro accidente de coche: Elise resultó levemente herida, pero su acompañante Charles Voisin falleció.
Casi un año después Elise “la baronesa voladora” como era conocida, con determinación y coraje, realizó un vuelo de larga distancia de más de cuatro horas de duración, por lo que conquistó la corona de reina de las aviadoras, ganando la Copa Femina del Aéro Club de France.
Durante la Primera Guerra Mundial sirvió como conductora militar, llevando a oficiales desde la retaguardia hasta el frente de batalla. En 1919 con gran dinamismo y seguridad en sí misma, Elise de Laroche logró una perfección extraordinaria, al establecer dos récords de aviación para una mujer: uno de altitud a 4.800 m y otro de distancia, de 323 km.
En julio de 1919, Elise viajó al aeródromo de Le Crotoy, para convertirse en la primera mujer en ser piloto de pruebas profesional. En un vuelo de entrenamiento, en el que iba como copiloto, durante la maniobra de aterrizaje, el biplano efectuó una acrobacia muy baja y golpeó el aparato contra el suelo, por lo que chocó y murieron ambos ocupantes.
Elise Deroche o Raymonde de Laroche tenía 33 años de edad.
En el Aeropuerto de París Le Bourget, Francia, hay una estatua dedicada a la Baronesa Raymonde de Laroche.
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