Beatrice Potter Webb nació en 1858 en Gloucester, Inglaterra. Reformadora social, socióloga y economista británica.
Aunque nació dentro de una acaudalada familia, Beatrice no recibió una educación formal; de carácter independiente, fue autodidacta leyendo los libros de la biblioteca de su padre, sobre filosofía, ciencias y matemáticas. Tuvo gran influencia de los intelectuales que visitaban su casa, especialmente del filósofo y sociólogo británico Herbert Spencer (1820-1903), gran amigo de su padre, con el cual mantenía largas conversaciones.
Beatrice trabajó durante unos años en las empresas de su padre, lo que le permitió conocer el mundo de los negocios, asi como entender mejor el origen de la explotación de los obreros. Su interés por la sociología y la investigación social la llevaron a acercarse a las ideas socialistas con el fin de acabar con las duras condiciones de vida y la explotación laboral indiscriminada. Colaboró junto a su padre Richard Potter en la “Charity Organization Society” para proporcionar ayuda a los pobres; pronto se dio cuenta que no era con caridad que se solucionaba la vida de los más desfavorecidos, sino en transformar la baja educación de los pobres, sus condiciones sanitarias y el acceso a viviendas dignas.
La era victoriana se caracterizó por el florecimiento industrial y el auge de la economía, pero también por la explotación de la clase trabajadora. Los únicos documentos para el estudio de la sociedad que disponía Beatrice eran las obras de escritores como Charles Dickens (1812-1870), George Bernard Shaw (1856-1650) entre otros, que hacían una aguda y directa crítica social. Esta sociedad conservadora y rígida, tenía grandes contrastes e hipocrecía: mientras la mujer de la clase burguesa, estaba relegada al hogar y cuidado de los hijos, los obreros, con mayoría de mujeres y niños, vivían en pésimas condiciones de pobreza con largas horas de trabajo.
Valiente y transgresora, Beatrice trabajó en Londres, como ayudante de su primo Charles Booth (1840-1916) un destacado reformador social, que realizaba un estudio empírico sobre las condiciones de la clase trabajadora en la ciudad. Beatrice, con tenacidad y responsabilidad, hizo una investigación en los muelles de East End, donde había una gran población de inmigrantes judíos y talleres textiles. Al publicarse estos trabajos, tuvieron gran impacto y fue el inicio de las primeras huelgas de obreros, reclamando mejoras en las condiciones de vida. De fuertes ideas socialistas, Beatrice se interesó por el cooperativismo: veia las cooperativas como una forma de asociación democrática; en 1891 publicó su libro “El movimiento cooperativo en Gran Bretaña”.
En 1892 se casó con Sidney Webb (1859-1947), otro intelectual socialista y su domicilio, en Londres, se convirtió pronto en un salón donde se discutía el ideario socialista. El matrimonio fundó junto a un grupo de intelectuales la Sociedad Fabiana: un grupo socialista, no marxista, cuyo fin era lograr una sociedad más justa a través de reformas sociales: un movimiento pacífico sin cambios dramáticos.
Sydney y Beatrice realizaron juntos trabajos de investigación y al ser miembros fundadores del Partido Laborista Británico, creado en 1900, tenían una actividad política activa; juntos publicaron “La historia del sindicalismo, en 1894, sobre el origen y crecimiento de los sindicatos, “Democracia industrial” en 1897, donde predominaba la idea de un Ingreso Minimo Nacional, por ley y para todos los ciudadanos, que permitiera llevar una vida digna.
Los Webb crearon en 1895 la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres y el semanario político The New Statesman en 1913, para influir en la opinión pública a través de la educación, artículos y conferencias. Beatrice fue autora de varias obras: “El trabajo y el nuevo orden social” (1918), “Los salarios de hombres y mujeres, deberían ser iguales?” (1920), entre otras; junto a su marido, un libro de gran impacto “La decadencia de la civilización capitalista” en 1923.
En 1932 los Webb viajaron a la Unión Soviética, invitados por Joseph Stalin (1878-1953): aunque era evidente la falta de libertad política, les admiró la mejora de los servicios sanitarios, la educación y la igualdad entre los sexos. Al regresar a Londres, apoyando los logros soviéticos, publicaron “Comunismo soviético: una nueva civilización?” en 1935 y “La verdad sobre la Unión Soviética” en 1942.
Beatrice Webb murió en 1943 a los 85 años, su esposo Sydney en 1947. Ambos están sepultados en la Abadía de Westminster.
En 1942 el economista y político William Henry Beveridge (1879-1963) presento el “Informe al Parlamento acerca de la seguridad social”, conocido como el "Primer Informe Beveridge", que estaba influenciado por las ideas y proyectos de gran contenido social de Beatrice Webb.
Fuentes y Bibliografía